Ojos cerrados. Respiro hondo.
Que asco me da esto de tener calor y frío al mismo tiempo. Podría venir el invierno de una vez, y ahorrarnos las medias mangas.
Siento que poco a poco tomo las riendas. No sé muy bien hacia donde voy, pero tengo claro por donde piso, que ya es bastante.
Y, dios, no puedo parar de pensar... Me hago ilusiones, continuamente, y al fin no son solo eso. Al fin hay alguien que me echa de menos, y quiere ver pelis conmigo, patinar, y que salta conmigo en los conciertos.
Y quiero parar de una puta vez de hacer el gilipollas. No sé porque me como la cabeza y acabo llegando a conclusiones estúpidas. Me ha dicho que adelante. ¿Pues que más me da lo demás? Solo quiero disfrutarle, ir poco a poco, y si sale mal... al menos lo habré intentado. Parece mentira que no aprenda nunca. Es decir, si siempre me caigo y me vuelvo a levantar, ¿por qué en este tema no puedo hacer lo mismo? No lo sé, no sé nada...
Bueno sí, se algunas cosas:
1) En el instituto soy feliz, haciendo al fin lo que me gusta.
2) He aprendido a pasar de la gente que no me importa.
3) Mis esperanzas depositadas en el último concierto de La Gossa no fueron en vano.
4) Me da que tampoco lo serán pasado mañana. Quiero abrazarle.
Un poco antes...
No sé nada de correr, no sé nada de ascender,
de esta mierda de arcoiris, del cigarro de después, no sé,...
Si la vida pasa en cueros, castigao a la pared.
No sé nada de aguantar, no sé nada de achuchar,
de ponerme de rodillas, de llorar para mamar, no sé,...
En cuanto acaben los tiros, garabatos al papel.
Que si me quedo con los dientes relucientes
y embarrao el corazón,tu tic tac y el mío son el mismo son...
...y eso sí que no.
...y un poco después.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)


0 comentarios:
Publicar un comentario