Tratar como prioridad a alguien que te trata como opción.

Hoy, ha sido un día bastante extraño. Intento organizar un poco las cosas que tengo que hacer, como dedicar una entrada a el magnífico mes de agosto que he pasado, etc...

Pero, como ya es habitual, necesito desahogarme un poco.

Hoy, me he vestido para salir por la noche. Tengo un catarro que no es normal, pero aún así tenía ganas de salir, esperando que alguien consiguiese sacarme una sonrisa. Pero hoy, todos, absolutamente todos, tenían algo que decir respecto a los acontecimientos que nos acechan.
Algunos prefirieron callarse; con besos interrumpidos, los demás; vinieron a contarme que les pasaba.

Y sí, supe encontrar una pequeña solución a cada problema planteado, aunque no por ello voy a dar saltos de alegría. Simplemente, me alegra el hecho de pensar, que mis ideas, aunque no sean las mejores del mundo, pueden gustarle a alguien o al menos, serles de utilidad.

Es como cuando pintas un cuadro y la gente se queda boquiabierta mirándolo, y a continuación añaden un "Oh, es precioso..."
Pues lo mismo pasa con esto. Me ha encantado que me digan "Flau, gracias, eres genial. Siempre haces que consiga mirar un poco hacia adelante...". Por un momento, me he sentido útil, aunque comprendía que las soluciones aportadas no serían las más acertadas.

El problema viene cuando, después de que medio pueblo te haya contado sus problemas y hayas conseguido hallar soluciones medio decentes, tú necesites que alguien te escuche y nadie esté por la labor.
Siempre estarán esas personas a las que puedes contarles tus problemas, porque te escucharán, pero o bien no te darán solución alguna, o bien estarán bastante deprimidos con sus problemas como para aguantar también los tuyos.

Por eso mismo me he dirigido hasta aquí, a las cinco de la mañana, para quedarme con la consciencia un poco más tranquila y dormir un tanto mejor.

Porque al fin y al cabo, y quitando la sensación de utilidad que ha permanecido durante unos instantes en mí, es muy frustrante salir esperando diversión y acabar con ganas de volver a nacer. Porque cuando todos están bien, todo va sobre ruedas, pero cuando hay problemas, no importa lo que a mí me apetezca o tenga ganas de hacer, porque simplemente, cada uno pensará en sí mismo, intentando limpiar su moral para quedarse más tranquilos.
Y mientras tanto, yo sigo aquí, esperando que alguien se tome la molestia de preguntar si puede ayudar.

creo que ya está casi todo dicho. Mañana más :3

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